El dominante comía como un desesperado y crecía a marchas forzadas: en solo un mes creció 1 cm. hasta alcanzar los 11 cm. Sin embargo, había uno pequeño, que supongo que es una hembra, no llegaba a 8 cm. y estaba casi todo el tiempo escondido tras unas piedras, ya que el dominante no lo dejaba vivir.
He de decir que el dominante no se peleaba con ningún otro pez, es más, el macho dominante de Tropheus moorii Nangu y el de Simochromis diagramma Isanga, lo perseguían de vez en cuando.
Al cabo de un mes aproximadamente, empezaron a llevarse bien:

Como empezaron a crecer más rápido de la cuenta, decidí llevarlos al acuario de 8.000 litros de mi amigo Guti, donde deben disfrutar de lo lindo.
El macho dominante:


Y supongo que una hembrita, aunque no los he sexado:




Cuando pase por casa de Guti, haré unas fotos de los Lobochilotes labiatus, los Petrochromis sp. texas Bulu Point y su magnífico acuario de 8.000 litros.
Saludetes.